Soy la persona detrás de ILU DENTAL. Estudié odontología porque siempre he querido ayudar, y con los años he aprendido que el trato humano es tan importante como el técnico. Trabajo desde el cariño y la cercanía, explicando todo paso a paso.
Creo en una odontología cercana, transparente y sin prisas. Lo importante no es solo lo que hago, sino cómo te haces sentir durante todo el proceso. Por eso, cada tratamiento está pensado con tiempo, calma y mucho mimo.
Elegirme es apostar por un trato diferente. No vas a sentirte como en una consulta más. Aquí hay tiempo, diálogo y un acompañamiento real desde el minuto uno. Cada paciente es único y eso se nota en cómo nos tomamos cada visita.
Te hago sentir acompañado en todo momento. No estás solo ante una bata blanca.
No busco arreglos rápidos, sino soluciones reales que cuiden de tu boca a largo plazo.
Desde que entras, te relajas. Aquí no hay prisas ni nervios, solo confianza y tranquilidad.